Sunday, March 6, 2011

NUESTRO CAMINAR CUARESMAL, UN TIEMPO PARA ESCUCHAR



Para vivir como seguidores de Cristo, en nuestro caminar cuaresmal, es necesario ubicarnos en el camino correcto desde el principio. Y un buen principio es practicar nuestra capacidad de escucha. Para nosotros como cristianos, esta es una buena oportunidad que tenemos para meditar en nuestra relación con Dios, con nuestro prójimo y con nosotros mismos.

Pasa que la mayor parte de nuestro tiempo estamos tan ocupados, que realmente no nos detenemos a pensar en esos tres estados del alma y de su interacción con Dios, con los demás o con nosotros mismos. Tal parece que no tenemos tiempo para esas cosas y tal vez consideremos que el tiempo que dediquemos a estas tres cosas, lo estamos perdiendo pues pudiéramos utilizarlos en sacar provecho a otras oportunidades de la vida.

Pues bien, lo que puede estar sucediendo, es que realmente no estamos haciendo lo más importante, el primer mandato de Jesús, pues tenemos tantas cosas en nuestra mente, en nuestra vida, tenemos tanto ruido en nuestro interior que realmente no tenemos tiempo para escuchar. En una oportunidad le preguntaron a Jesús: Cual de los mandamientos encabeza a los demás? Jesús les contestó: "El primer mandamiento es: Escucha Israel: El Señor nuestro Dios, es un único Señor. Al Señor tu Dios amarás con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu inteligencia y con todas tus fuerzas. Y después viene éste: Amarás a tu prójimo como a tí mismo. No hay ningún mandamiento más grande que éstos". (Marcos 12, 29).

Usemos entonces este tiempo de cuaresma, como  tiempo para escuchar... no es mucho tiempo que nos exige Dios, pero si practicamos la habilidad de escuchar, seguramente encontraremos el camino, el verdadero y auténtico camino.